Linux tiene una larga y difícil historia a sus espaldas pero no por ello ha logrado hacerse un hueco claro en el mercado de consumo, si bien en el mundo corporativo es una opción más que aceptada y muy común para determinadas funcionalidades, como el hosting web.
Pero 2012 puede ser el año en que esta tendencia cambie y Linux logre consolidarse como un competidor claro para los sistemas operativos de consumo más populares, un mercado que sigue liderando Windows seguido de Mac OS. Los expertos informáticos llevan años ensalzando las virtudes de una plataforma de código abierto como Linux y parece que en el mundo móvil esta aproximación ha calado hondo, con el éxito palpable de Android. Ahora, le toca el turno a las computadoras de escritorio y portátiles.
Entre las ventajas que posee Linux frente a sus competidores, los expertos señalan la diversidad, que si bien puede ser entendida como un problema de fragmentación, es una de sus principales fortalezas. Así pues, existe una distribución de Linux orientada específicamente a cada necesidad posible que se pueda imaginar, desde las que han sido desarrolladas pensando en el uso personal como Mint o Ubuntu gasta las más orientadas al mundo profesional, como Fedora.
Pero los fanáticos de Linux defienden que no sólo se puede escoger qué distribución de Linux usar, sino que además ésta es personalizable casi en su totalidad, ya que no existe ningún vendedor que dicte cómo debe ser usado el equipo. Una flexibilidad que proviene de su carácter abierto. Nadie controla el código por lo que cada usuario puede modificar la plataforma a su gusto y compartir, si quiere, estas mejoras con el resto de personas que utilicen Linux.
Por otro lado, Linux es uno de los sistemas más fiables que existen en la actualidad. Junto con Mac OS (con quien comparte el código base Unix), esta plataforma solventa la mayoría de caídas y fallos que tienen otros sistemas como Windows. Además, Linux consume menos recursos de hardware que sus competidores, con lo que su velocidad es manifiesta. De hecho, existen incluso distribuciones cuyo principal objetivo es la velocidad por encima de las funcionalidades y que funcionan sobre equipos ya obsoletos.
Seguro e interoperable
Las distribuciones de Linux son realmente seguras, por lo que los ataques de seguridad son casi nulos en esta plataforma. Asimismo, Linux es interoperable con otros sistemas propietarios, incluso más de lo que ellos mismos lo son entre ellos, en referencia a la compatibilidad entre Windows y Mac.
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