CALAVERITA MACQUERA (Dedicada a Steve Jobs)

Mientras la muerte revisaba sus pendientes,

Se preguntaba si entre sus conocidos

De su página web de negocios y clientes,

Habría un millonario de acciones presentes.

Y mirando en su lista de espera,

Encontró el nombre de un hombre que sueña

Y viendo que era un afamado empresario

Le advirtió que rezara su rosario.

Steve que en su mundo fue un genio

Vendiendo manzanas en forma de cajas

La pequeña huesuda no quiso perderse

Los beneficios de las Ipads potentes.

Después de una larga vida de fortuna

Y también un poco de desventura,

La huesuda se comió la manzana de Steve;

Y con gran tristeza y sin mesura,

Lloran los ipods, tocando a volumen suave

La tonada de una gran canción de altura.

Ahora desde allá donde esté, esperemos,

Que una nueva Mac les este inventando

Porque San Pedro necesita ayuda

Para contar a los que al cielo vayan llegando.